La mayoría social a favor de la muerte digna encuentra eco en el Parlamento: España es el cuatro país en Europa que reconoce y regula este derecho.
Solo los dos partidos autodenominados “de la libertad” han votado en contra de la libertad de elegir cómo poner fin a una vida con dolor. El Congreso ha aprobado hoy, con una clara mayoría, la ley orgánica de regulación de la eutanasia por 198 votos a favor, 138 en contra (PP y Vox) y dos abstenciones. España se convierte así en el sexto país del mundo que regula el derecho a la muerte digna. En Europa solo lo han hecho antes Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo.
“Hoy no solo empezamos a conquistar un nuevo derecho. Hoy emprendemos también el camino para que este derecho esté incluido como una prestación más en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud”, afirmó el ministro de Sanidad, Salvador Illa. “Humanidad, empatía y compasión para ponernos en el lugar de quien sufre. De eso va esta ley, que sirve para avanzar en los derechos civiles”, explicó, por su parte, la exministra María Luisa Carcedo.
La ley, propuesta por el Grupo Parlamentario Socialista, nace con la intención de ser muy garantista. Quien quiera pedir ayuda para morir debe hacerlo en una situación y en unos plazos muy concretos. Debe hacerlo, además, cuatro veces, y dos de ellas por escrito. Nadie puede hacerlo en nombre del o de la solicitante, ni su cónyuge ni sus hijos ni ningún allegado. Solo el propio interesado.
Según indica expresamente la norma, la eutanasia se aplicará “a petición informada, expresa y reiterada en el tiempo” por la persona afectada, y se llevará a cabo “en un contexto de sufrimiento debido a una enfermedad o padecimiento incurable que la persona experimenta como inaceptable y que no ha podido ser mitigado por otros medios”. La ley, en cualquier caso, reconoce a los médicos la objeción de conciencia a la hora de aplicar este procedimiento.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, no habló desde el hemiciclo. Se pronunció a través de las redes sociales, señalando que la ley aprobada hoy es “una gran conquista social para nuestro país”.
La aprobación en el @Congreso_Es de la Ley de #Eutanasia supone una gran conquista social para nuestro país. Avanzamos en libertad, en derechos civiles y en dignidad. Gracias a los grupos que han apoyado esta norma y a las personas y colectivos que han trabajado para conseguirlo. pic.twitter.com/Px09WoJ1od
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) December 17, 2020
La oposición inventa o divaga
El jefe del partido ultraderechista Vox, Santiago Abascal, se pronunciaba en términos muy diferentes, afirmando que hoy era, seguramente, “uno de los días más funestos de la democracia”. En un ejercicio tremendista de alarmismo y desinformación, el líder publicó en las redes que la nueva ley condena a muerte a “los más indefensos”.
El Partido Popular, que también votó en contra, aseguró, por medio del diputado José Ignacio Echániz, que esta ley “es una derrota para todos”. En su lugar, el partido conservador propone sedación, tratamiento profundo del dolor, tratados paliativos y un testamento vital. Es decir, que propone lo que ya existe. A falta de iniciativas y de razones de peso, lo que no le faltó al diputado popular son adjetivos: el texto de la nueva ley es, a su juicio, “inconstitucional, inoportuno, frívolo, chapucero e injusto”.
En una posición más centrada, el PNV, un partido conservador históricamente ligado al catolicismo, se mostró a favor de la ley haciendo una exhibición de moderación y verdadero liberalismo: “Consideramos que tenemos la obligación de legislar más allá del código ético de cada uno, dando cobertura legal a quien, por su forma de entender la vida y la muerte, no piensa igual”, dijo Joseba Agirretxea.
Según una encuesta realizada en 2019 por Metroscopia, el 87% de los españoles y las españolas está a favor de la eutanasia. “Hoy se impone el sentido común y la humanidad”, aseguró el ministro Illa en el Congreso.
Fuente: lamarea.com