“Sabemos lo que pasa en los barrios y sabemos que se puede gobernar mejor”, Elena Sigüenza de la Asociación Vecinal de Comillas

La vicepresidenta de la FRAVM sabe de lucha, de tiempos duros y de lo colectivo. También sabe del “hay que estar ahí” y de arrancar los derechos. Aquí nos hace una radiografía del sentir de los barrios madrileños antes del 28M

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Elena Sigüenza Carbonell nació en Madrid en 1951. Desde entonces ha desgastado todos sus zapatos por los barrios de Carabanchel. A principios de los años ochenta decidió entrar en el movimiento vecinal, mientras estudiaba Historia Contemporánea, trabajaba y cuidaba de su hijo —seguramente su jornada sobrepasaría la de cualquier obrero en una fábrica de la época—. Dice que entró porque siempre hubo que pelear, pero más aún cuando este país salió de la dictadura franquista. “En la transición tenía que haber un cambio y se necesitaba gente en todos los lados”.

Toda su vida trabajó como documentalista y ahora, con 72 años, lleva jubilada unos cuantos. Sabe de lucha, de tiempos duros y de lo colectivo. También sabe del “hay que estar ahí” y de arrancar los derechos. Asegura que Almudena Grandes le hizo llorar con Manolita y sus tres bodas. Se emocionó con ese Madrid de posguerra y de cárcel que vivió una joven que todo lo tuvo difícil.

A finales de marzo de 2023, Sigüenza fue elegida vicepresidenta de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), una organización que representa a día de hoy a 296 entidades del territorio. Nos sentamos en el local de la Asociación Vecinal de Comillas —donde todavía continúa activa— para hacer una radiografía del sentir de los barrios madrileños antes del 28M.

Por primera vez, las mujeres son la mayoría en la junta directiva de la FRAVM, ¿está ligado el movimiento vecinal al feminismo?

Por supuesto. El feminismo también cuesta en las asociaciones vecinales. Hemos avanzado mucho. Las mujeres han sido las que han estado al pie del cañón siempre, porque en los años 80 y 90 mientras los hombres se iban a trabajar, cumpliendo su papel estereotipado, las mujeres estaban en los barrios. Cuando en un lado del barrio había que pelear por la vivienda, en el otro lado había que hacerlo por el aborto. En su momento, creamos grupos que se llamaban “Mujeres vecinales”, pero ahora ya estamos dentro de las asociaciones y tenemos un peso. Cuando se unen el movimiento vecinal y el feminista, somos la bomba. Es verdad que todos los presidentes de la FRAVM han sido hombres, a veces, a las mujeres nos cuesta dar ese salto. Por eso necesitamos también a los y las jóvenes. En Carabanchel necesitamos que la gente se incorpore al movimiento, porque al final el movimiento vecinal es el que toca todo, la tala, la sanidad, la educación, el ingreso mínimo vital, la cultura. Desde la transición hemos tenido que ir arrancando los derechos. Y ahora, cuando puede haber mayorías absolutas, estamos en una situación parecida en el sentido de que no podemos bajar la guardia.

“Cuando en un lado del barrio había que pelear por la vivienda, en el otro lado había que hacerlo por el aborto. En su momento, creamos grupos que se llamaban “Mujeres vecinales”, pero ahora ya estamos dentro de las asociaciones y tenemos un peso”

¿Cómo evaluáis desde la FRAVM la gestión de estos cuatro años del gobierno de Ayuso?

Han sido una pesadilla. Principalmente la situación de la sanidad en toda la Comunidad de Madrid. Con la señora Ayuso no hemos avanzado absolutamente en nada. Cada vez que habla dice que va a hacer no sé cuántos centros de salud, los prometió en 2019 y en 2021, y los barrios seguimos teniendo las mismas infraestructuras. Han sido años muy duros y en detrimento de la población madrileña. Hemos visto que el nivel democrático brilla por su ausencia. Tras la pandemia, el clamor de toda la población fue la defensa de la sanidad. No se ha conseguido sentar a nadie que dé explicaciones de por qué se autorizó ese protocolo de la vergüenza en las residencias y se les dejó morir solos. Como presidenta ni lo asume y cuando habla, encima, tira contra los familiares, la izquierda y contra todo.

Supongo que verías ese momento de tensión en el debate de Telemadrid, cuando la candidata Alejandra Jacinto se acercó a Ayuso para entregarle el libro “Morirán de forma indigna” de Alberto Reyero, exconsejero de Políticas Sociales de la Comunidad de Madrid.

Sí, me tragué el debate entero. Lo peor eran los comentaristas de Telemadrid diciendo quién ganaba. Ayuso hiere a mucha gente, incluso en su propio partido porque en las movilizaciones de la sanidad también hay votantes del PP y saben que no mentimos cuando hablamos de las listas de espera, de la cantidad de recursos perdidos o de cómo se ha machacado a los profesionales sanitarios. Para ella parece que no pasa nada. Esperamos que esta próxima legislatura esto cambie, porque Madrid no se merece tener ni esta presidenta, ni este gobierno en la Comunidad.

Elena Sigüenza en el Parque de Comillas, el cual se verá afectado por las obras de ampliación de la linea 11

Cada vez nuestro documento de propuestas tiene más páginas, porque prácticamente no hemos conseguido nada y los problemas siguen aumentando. Para nosotros la defensa de lo público es intocable”

Desde la FRAVM os habéis reunido en este periodo electoral con casi todos los partidos para acercarles vuestras propuestas, ¿cuáles son las principales?

Cada vez nuestro documento de propuestas tiene más páginas, porque prácticamente no hemos conseguido nada y los problemas siguen aumentando. Para nosotros la defensa de lo público es intocable. Se nos va la vida en la educación, donde hay todavía institutos y colegios que están sin acabar, incluso en barracones. En este barrio [Comillas] y en la mayoría de ellos, necesitamos medidas contra el cambio climático porque hace un calor extremo en los colegios. Necesitamos toldos y un sistema que no sea solamente de cemento, porque los niños están saliendo a los patios en pleno cemento que arde y no hay ni un árbol en muchos de ellos. El año pasado en el colegio Lope de Vega hubo dos niños que sufrieron un golpe de calor. También el tema de la movilidad. El tren de cercanías un día sí y un día también tiene averías. Otro punto importante es apoyar a los vecinos de San Fernando de Henares, cuando la señora Aguirre modificó el proyecto de la línea 7 y se empezaron a caer las casas. Esto siguen sin solucionarlo y las casas se caen. Muchos de los vecinos siguen pagando hipotecas sin tener una vivienda, ni saber lo que les van a dar. También el tema de cómo se está abordando la línea 11 del metro, sobre todo en Arganzuela y Comillas, y las movilizaciones que hay en contra de la tala, porque no todo vale. Y no solamente lo de la L11, vemos que cada vez que inician una obra en cualquier sitio talan sin motivos, son unos arboricidas. Otra demanda fundamental es la falta de vivienda pública. En la zona de Carabanchel este no tenemos mucho terreno y el poco que hay es para vivienda de libre mercado.

¿Siguen siendo los barrios del sur los más castigados por las administraciones locales?

Creo que hay una desidia total. También hay nuevos desarrollos en el norte que están sin infraestructuras. En cualquier barrio nuevo, primero son las casas, después las casas y lo último las casas. Al final no llegan los servicios, ni los centros de salud, ni los colegios, ni los polideportivos. En esta zona de Carabanchel de 250.000 habitantes no hay una sola piscina ni un polideportivo. Lo que notamos es que no se han preocupado nunca por nosotros. Lo poquito que se ha hecho a nivel municipal viene de la etapa de Carmena. En el sur se necesita invertir más porque hay más población y se están acumulando las necesidades. Parece que tienen un cierto desprecio a estas zonas, justo donde vive la población obrera y la que no vota a la extrema derecha. Mientras Ayuso se ha dedicado en plena pandemia a reivindicar los bares y las terrazas, en los barrios nos han tenido confinados y menos mal que pudimos salir adelante porque muchas organizaciones sociales, incluidas las asociaciones vecinales, nos lanzamos con las despensas para ir solventando el problema.

Nosotros somos transmisores de lo que pasa en nuestros barrios. No somos los únicos. Cuando la gente tiene problemas va a los sitios que están organizados, como las asociaciones vecinales”

Las asociaciones vecinales convocasteis las dos grandes manifestaciones que se celebraron en defensa de la sanidad pública en noviembre de 2022 y febrero de 2023. ¿Cómo recordáis ese momento ahora que se acercan las elecciones?

Lo miramos con preocupación. Este Madrid es muy complejo. En esta ciudad hay mucha izquierda, pero también hay mucha derecha y extrema derecha. Quieren convertir Madrid en una ciudad para ricos, para grandes inversores. A Ayuso no le importa de dónde vengan los inversores, si es lícito o ilícito. Para nosotros está claro, quien más tiene es quién tiene que pagar más. A Ayuso le gustaría que Madrid fuera el paraíso fiscal para los ricos, para una población que no es la mayoritaria. No he visto nunca en nuestros barrios de Carabanchel a esta presidenta, ni a la anterior. Hay algo que está claro, para defender lo público hace falta tener unos presupuestos en condiciones. Me gustaría sentarme con ella para preguntarle cómo es posible que construyera el Hospital Isabel Zendal y cerrara los centros de urgencias de los barrios, y que además siguen cerrados. En Carabanchel llevamos más de 20 años esperando por un centro de salud. Sabemos lo que pasa en los barrios y sabemos que se puede gobernar mejor. Muchas organizaciones llevamos más de 40 años, hemos hecho todo el trayecto desde la dictadura a la democracia. Peleando en los barrios por lo imprescindible, por el agua, los precios, la vivienda o el alcantarillado. Nosotros somos transmisores de lo que pasa en nuestros barrios. No somos los únicos. Cuando la gente tiene problemas va a los sitios que están organizados, como las asociaciones vecinales.

Elena Sigüenza Sabe de lucha, de tiempos duros y de lo colectivo y ha desgastado sus zapatos por los barrios de Carabanchel. Hoy es vicepresidenta de la FRAVM.

A los partidos políticos les pedimos lo de siempre, que nos escuchen y que cuando vayan a hacer algo en el barrio nos lo consulten”

¿Qué le pedís a los partidos políticos este 28M? ¿Y a las vecinas y vecinos?

A los partidos políticos les pedimos lo de siempre, que nos escuchen y que cuando vayan a hacer algo en el barrio nos lo consulten. Nos sentimos ninguneados, con la Comunidad de Madrid no tenemos ningún trato porque no se acercan. Con el Ayuntamiento solo un poco más, sobre todo con las Juntas Municipales de Distrito. Y a la gente le pedimos, lo primero, que voten. También que tengan claro quién ha estado defendiendo la sanidad y las horas que nos hemos pasado, nos pasamos y nos pasaremos en nuestros centros de salud apoyando a las sanitarias, todos los jueves en tantos barrios.

Fuente: Selena Pizarro en elsaltodiario.com

Fotos: David F. Sabadell

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