Música en entornos naturales e históricos, lejos de los macro eventos

Finaliza el verano, sinónimo de las vacaciones, calor y sobre todo Festivales de Música. Y en esos tres intensos meses, sobre todo en fines de semana, varios de ellos han coincidido en territorio español, por lo que algunos de sus asistentes han hecho malabares en la agenda para asistir a los más solicitados.
- El Garraf: la otra cara del verano festivalero
- Vilanova i la Geltrú: Pasión por los Festivales
- Vida Festival
- Nowa Reggea
- Festival internacional de música popular tradicional (FIMPT)
- El tingladu
- Sitges: La dualidad de la elegancia y las entidades culturales
- Festival de tributos a la música de los 80 y 90
- Festival Terramar CaixaBank (Sitges)
- Barraques de Sitges
- Festival Super Mati Custom
- Sant Pere de Ribes
- Monocicle. Apoyo a la música de autor y a sus nuevos talentos
- Feel Chill Experience
Son una oportunidad única para sentir la música en directo, sin estar en un espacio cerrado de un estadio o sala de conciertos, donde la experiencia va más allá de las actuaciones, sobre todo en la época de Instagram y otras redes.
España gracias al buen clima y los horarios es perfecta para estos grandes eventos musicales con miles de asistentes, siendo un reclamo para el turismo de festivales de todo el mundo. Los más conocidos internacionalmente son: Sonar (junio en Barcelona), Primavera Sound (junio en Barcelona, Kalorama (junio en Madrid), Mad Cool (julio en Madrid), FIB (julio en Benicàssim), BBK Live (julio en Bilbao), Low Festival (julio en Benidorm), Monegros Desert Festival (julio en Monegros), Arenal Sound (julio/agosto Burriana-Castellón) y Cruilla (julio en Barcelona).
El Garraf: la otra cara del verano festivalero
Mientras los macro festivales concentran la atención mediática, existe otra manera de vivir la música en directo, de forma menos masificada, siendo más cercana y en sintonía con el entorno. Un ejemplo claro es el Garraf, una comarca que se consolida, verano tras verano, como territorio de festivales con identidad propia y adaptados al entorno natural.
Situado estratégicamente entre Barcelona y Tarragona, y apenas a veinte minutos en tren desde el aeropuerto del Prat, el Garraf ofrece una experiencia festivalera diferente: con escenarios naturales como el Parque Natural del Garraf, que cuenta con un monasterio budista, que combinan montaña, mar y arquitectura singular, lejos del asfalto y las multitudes urbanas. Aquí, los festivales no buscan únicamente cartel, sino también alma y esencia del territorio, que además también es tierra de viñedos.
Hablamos de una pequeña comarca formada por 6 poblaciones: la capital es Vilanova i la Geltrú, la más turística es Sitges, Cubelles, siendo estas tres ciudades costeras y las interiores que son Sant Pere de Ribes, Canyelles y Olivella.
La singularidad del paisaje ofrece escenarios y zonas ideales para celebrar festivales, y su diferenciación radica no solo en el entorno natural de cada población, sino en cómo en los últimos años se han ido especializando estos eventos en un tipo de público y género musical.
Por ello, la propia geografía limita el número de asistentes y se alejan del estilo de las grandes ciudades y actos multitudinarios, por lo que en muchas ocasiones los bonos y entradas se agotan rápido, como si de un pequeño secreto o boca a boca se tratara, ya que permiten disfrutar de grandes artistas en entornos mágicos y con más cercanía.
Las poblaciones del Garraf han sabido transformar sus singularidades culturales, paisajísticas y patrimoniales en elementos clave de su programación musical. Cada festival tiene su sello, su público y su enclave. No hay copias ni tampoco fórmulas repetidas. Además, cuentan con un sello propio, “Garraf Sona”, que reúne a la gran mayoría de los eventos culturales (gastronomía, literatura…) y también algunos de estos festivales.
Vilanova i la Geltrú: VIDA Festival, Nowa reggae, Tingladu, FIMPT
Sitges: Concerts de Mitjanit, Festival Terramar Caixabanc, Les Barraques.
Cubelles: Festival Supermaticustom.
Sant Pere de Ribes: Monocicle.
Olivella. Feel chill experience.
Vilanova i la Geltrú: Pasión por los Festivales
La capital del Garraf alterna ese espíritu de no querer crecer como ciudad ni convertirse en una población turística invadida por turismo masificado, pero cuando hay festivales musicales el público y visitantes son muy bienvenidos y se adaptan al ritmo de la ciudad. Aunque cuenta con apartamentos y hoteles, los campings de la zona son los grandes beneficiados por la llegada de numerosos jóvenes a la ciudad. La extensión de la ciudad, que vive entre el mar con 6 km de playa, entorno natural y edificios históricos, ofrece localizaciones perfectas para los diferentes festivales que se celebran.

Vida Festival
Fecha anunciada para 2026: del 2 al 4 de julio.
Géneros: Indie, pop, electrónica, rock alternativo.
Vilanova se lleva buena parte del protagonismo gracias a un calendario repleto de festivales, siendo el más conocido es el VIDA Festival, heredero del espíritu indie del mítico Faraday, festival de música independiente, que se celebró durante años en un enclave mágico, al lado del faro y de la playa de Sant Cristòfol, con unas vistas impresionantes al mar hasta el 2013.
Con el tiempo se necesitó ampliar el espacio reducido a dos escenarios, y se cambió el mar por otro entorno privilegiado que es el de la Masía Cabanyes, situado a las afueras de Barcelona, con un edificio histórico del siglo XVIII y ejemplo del romanticismo, junto a sus jardines y espacio abierto rodeado de bosques. VIDA es más que un evento musical, es una experiencia donde la naturaleza, la cultura local y las bandas se entrelazan para crear algo único.
VIDA FESTIVAL ha conseguido consolidarse como una referencia nacional e internacional sin perder su aire íntimo. En este entorno natural, entre pinos y plantas autóctonas, el festival apuesta por la sostenibilidad, el arte y una cuidada selección musical.
Pero, además, va más allá de estos tres intensos días, VIDA RECORDS & FRIENDS es un ciclo de conciertos que ofrecen durante el año, tanto con actuaciones de bandas ya consolidadas como con la búsqueda de nuevos. Y además cuenta con la propia discográfica VIDA RECORDS que promueve la difusión de nuevas bandas y talentos.
Cuenta con dos grandes escenarios principales en la gran explanada; El Estrella Damm y La Masía, que van alternándose, pero el encanto recae en los diferentes escenarios de pequeñas dimensiones situados en la zona del Bosque, son El vaixell (el barco), La Cova Eastpak y La Cabaña Jägermusic, allí se pueden descubrir nuevos talentos (como sucedió como Rosalía o Parcels, antes de llenar grandes estadios mundiales), siendo perfecto para cantautores y nuevas formaciones, donde la gente se sienta en el suelo o baila entre los árboles. Otro espacio es el VIDA CLUB con una programación donde se da protagonismo a los DJs, y la parte más privilegiada es el WILD SIDE o la zona más VIP del festival, un espacio más elevado y situado en los jardines y la Masía Cabanyes, donde además hay degustaciones con precios especiales. También hay un espacio familiar, con actuaciones dirigidas a los más pequeños y otra zona de juegos y espacios con talleres creativos. No pueden faltar los foodtrucks, espacio de artesanos, ropa y merchandising. Uno de los aspectos que más impresiona a todos los asistentes, ya los propios músicos, es la inmersión que se consigue con los diferentes juegos de luces, espejos y decoración que ambienta todo el bosque y lo transforma en un espacio mágico, lleno de recuerdos para Instagram y hashtags, por algo juegan con la idea “This is not a festival”.
VIDA ofrece dos entornos muy diferentes, la parte fuerte del Festival se celebra durante las tardes y noches en LA MASIA CABANYES y su zona boscosa, pero también ofrece una muestra de conciertos durante las mañanas del fin de semana (para los que no están durmiendo y descansando) trasladando la música al espacio privilegiado LA DAURADA, situado frente del mar y justo al lado del puerto de Vilanova. Allí cuenta con dos pequeños escenarios que animan a bailar al público mientras disfrutan del baño, bebidas refrescantes y espacios con sombra, estos además son gratuitos y no hace falta tener la pulsera de acceso.
En sus ediciones el festival ha contado con grandes artistas como: Wilco, The Divine Comedy, Lana del Rey, Rufus Wainwright, Primal Scream, Franz Ferdinand, Madness, The Charlatans, M.I.A., James Blake, Aurora, Suede, The Libertines, Supergrass, CA7RIEL & PACO AMOROSO… y en esta edición del 2025 han acudido 32.000 asistentes.
Nowa Reggea
Festival de música jamaicana (18-19 julio)
Generos: Reggae, dub, ska, rocksteady.
NOWA REGGAE, nació en 2006 y se ha convertido en una cita clave para celebrar la música jamaicana y sus derivados, como la cultura sound system. Es un ambiente relajado y familiar, e igual que el VIDA también empezaron en el Molí de mar, al lado del faro y la playa de Sant Cristòfol, trasladando el Festival al Parque de Ribes Roges, justo delante de la playa y del paseo marítimo.
Su cartel promueve tanto artistas españoles como grandes nombres internacionales, y han actuado leyendas jamaicanas como Ken Boothe y Skatalites, fundadores del rocksteady y el ska, estilos que aún perduran en el siglo XXI.
A destacar que la entrada es gratuita, por lo que se aconseja a los asistentes que vayan a primera hora, ya que el aforo está limitado por la extensión de este parque a primera línea de la playa de Ribes Roges, con muchos espacios con sombra por los árboles, banderas rastafari y una capacidad máxima de 2.000 personas.
Convirtiéndose en un espacio donde no solo se celebra la música, sino también el mensaje de paz, unidad y amor que transmite el reggae. Situado justo al lado del paseo marítimo y cerca de la estación de Renfe, es un pequeño oasis lleno de árboles, con espacios donde tumbarse y relajarse y con la playa de Vilanova delante, un lugar perfecto para dejarse llevar por sonidos jamaicanos.
Festival internacional de música popular tradicional (FIMPT)
Un viaje sonoro alrededor del mundo (del 9 al 12 de julio de 2026)
Géneros: Música popular, grupos tradicionales, música étnica.
Fechas: Inicios de julio.
FIMPT es el Festival Internacional de Música Popular Tradicional que pone en valor la música de raíz de diferentes culturas del mundo, ya cuenta con 44 ediciones (nació en 1981) y está organizado por el Ayuntamiento y el departamento de cultura. Se trata del festival más longevo y de mayor trayectoria del estado dedicado a las músicas de raíz.
Destaca la función de celebrar la diversidad cultural a través de la música, preservando y difundiendo las tradiciones musicales de diferentes países y culturas. También se promueve una programación equilibrada en sus franjas horarias y se celebra en diferentes espacios de la ciudad, para que pueda adecuarse a diferentes perfiles de público, aunque La plaza del puerto cuenta con los dos escenarios principales. Alterna tanto artistas consolidados como nuevos grupos, sin olvidar las propuestas locales.
La fecha exacta varia cada año, pero son 4 días con actuaciones, y se celebra siempre entra la primera o la segunda semana de julio. Lo mejor del festival es la diversificación de escenarios, que permiten a los asistentes a recorrer la ciudad, desde el barrio de mar donde los grupos grandes, que en muchas ocasiones van acompañados de bailarines con danzas tradicionales, se sitúan en los dos escenarios de la Plaça del Port, hasta la rambla donde hay actuaciones itinerantes hasta llegar a espacios como el patio del Castillo de la Geltrú (barrio medieval).
El tingladu
Acercar la música para todos los bolsillos (último fin de semana de julio)
Estilos: Ska, rock, electrónica, funk, reggae, hip-hop, pop
Fechas: Última semana de julio.
El Tingladu, por su parte, se convierte en altavoz de la música y cultura catalana y se celebra desde 2008, Organizado por la Entidad Cultural sin ánimo de lucro Can Pistraus, es un festival autogestionado y consciente. Con la voluntad de ofrecer conciertos de artistas conocidos, pero también como apuesta por aquellos otros grupos o cantautores que no tienen presencia ni difusión en otros festivales similares. Es una propuesta que no se limita a un solo estilo, sino que abarca una amplia gama de estilos musicales.
Pero no sólo han actuado artistas catalanes, pero también de ámbito nacional e internacional, como: Sopa de cabra, Manel, Txarango, Sílvia Pérez Cruz, Julieta, Misshima, Tomeu Penya, Manu Chao, La Mala Rodríguez, Fermín Muguruza, Leo Bassi, Alidé Sans, SFDK…
Actualmente su ubicación es en el parque de la Torre d’ Enveja (construcción medieval del siglo X), donde también está la Ermita de Sant Joan (la capilla más antigua del municipio, del siglo XIII), este parque es uno de los principales pulmones y zona verde de la ciudad.
Se celebra en la última semana de julio, uniéndose con los actos de la Fiesta Mayor, y atrae sobre todo a un público muy joven.
Actualmente Festival tiene un precio simbólico (no llega a los 10 euros), aunque en las primeras 12 ediciones era gratuito, y funciona gracias a la implicación de los casi 300 voluntarios.
Sitges: La dualidad de la elegancia y las entidades culturales
Esta ciudad costera, con sus tradicionales casas blancas y puertas azules, es la más turística de la costa del Garraf, además atrae a muchos visitantes con alto nivel adquisitivo. Su proximidad con Barcelona atrae a muchas personas a visitar sus playes o vivir la noche en la famosa calle del “pecado”, con locales de copas y bares musicales, además de muchos locales de ambiente gay.
A la vez muestra su arquitectura modernista y también pasado indiano que se percibe en grandes mansiones, sin olvidar la pasión por el arte presente en varias galerías de arte, exposiciones y sus museos históricos, cuenta con espacios con encanto como el Raco de la Calma Sitges y el espectacular Puerto (Port d’ Aiguadolç). Conocida por su espectacular carnaval y el Festival de Cine fantástico, también ofrece una programación musical que combina elegancia y arquitectura.
CONCERTS DE MITJANIT (CONCIERTOS DE MEDIANOCHE)
Festival de tributos a la música de los 80 y 90
El inicio del verano en Sitges empieza con este ciclo de conciertos gratuitos y nocturnos, que se celebran varios sábados de junio y julio en el espectacular Puerto de la población.
Fechas: del 7 de junio hasta el 26 de julio.
Estilo: Homenajes cantantes y grupos.
La mayoría son grupos tributo y homenajes a grandes figuras de la escena musical, y además este 2025 ha coincidido con la celebración de los 50 años del Puerto. (inaugurado el 7 de junio de 1975). Un puerto ciudad, con sus construcciones blancas y cuidadas, mucha oferta de gastronomía de calidad, ya que cuenta con 14 restaurantes y también hoteles, además de locales de copas.
Conciertos delante de yates y otras embarcaciones, ante el mar y disfrutando de cada detalle cuidado del puerto, la iluminación y la gran torre. Una programación de 8 conciertos en esta localización tan mediterránea, y organizado por el propio Puerto
Festival Terramar CaixaBank (Sitges)
Conciertos eclécticos en un ambiente más elegante.
Fechas: Fines de semana desde 25 de julio hasta el 10 de agosto 2025.
Estilo: Pop, rock, música clásica, flamenco, …
El Festival Terramar es otro ejemplo claro de conciertos más íntimos en un entorno cuidado y vinculado a la población. Este se celebra desde 2017 y sigue el concepto de festival boutique ofreciendo conciertos al aire libre en un jardín novecentista. El público asiste a unos conciertos no masificados y sin elementos artificiales, en un entorno con esculturas, fuentes y vegetación mediterránea. Aquí la música dialoga con la historia, el diseño y la gastronomía.
Ofrece una opción muy variada y ecléctica de artistas, enfocado a diversificar el público por estilos de música y edad, pero además se celebra durante tres fines de semana. (entre julio y agosto), con un aforo diario máximo de 2.500 personas, siendo un lujo poder ver grandes nombres que suelen actuar en grandes festivales y escenarios inmensos, y que aquí se escuchan y sienten de forma cercana.
Si se quiere vivir una experiencia más vip, cuenta con la Village Experience, que incluye diferentes degustaciones gastronómicas, espacio reservado y aforo reducido sin colas.
Han actuados artistas internacionales y nacionales como:
Hauser, Ara Malikian (música clásica e instrumental), Aitana, Ana Mena, Luis Fonsi, Morat, Manuel Turizo, Loreen… (artistas del momento), Joan Báez, Rick Asley, Tom Jones, Kraftwerk, Ana Belén, Hombres G, Niña Pastori, Camela, Melendi, Miguel Poveda, Rosario, Orozco, Amaral, Vanesa Martín… (cantantes y grupos con una amplia carrera) y Sopa de cabra, Joan Manuel Serrat, Stay Homas, Lax’n Busto… (artistas catalanes).
El entorno traslada a los asistentes a la elegancia del pasado, que aún mantienen los cuidados jardines novecentistas, situados al final del paseo marítimo de Sitges y más alejados del bullicio del centro de la ciudad. Terramar significa “tierra y mar” y fue concebida como una glamourosa ciudad-jardín en 1919, bajo el propósito de ser un espacio de ocio y descanso que contara con equipamientos variados y atrajera turismo con buen nivel económico. Se construyeron dos hoteles, el parque con fuentes, estatuas y zonas verdes cuidadas, además de una veintena de casas particulares.
Un espacio circular y cuidado con mimo, donde además se prioriza crear un espacio más selecto, gastronomía de calidad, algo que distingue este festival y que destacan sus directores Ferran Fanlo y Joan Ramon Rodríguez. El festival ha superado los 24.000 espectadores, en el gran escenario donde han actuado durante dos semanas.
Barraques de Sitges
Celebrado del 14 al 16 de agosto.
Estilo: Folk, punk-rock, reggae…
Totalmente opuesto a la idea del Festival Terramar, este mantiene la esencia popular y juvenil, está organizado por el colectivo local “Barraques”, y se organiza justo una semana antes del inicio de la fiesta mayor en Sitges.
El emplazamiento de nuevo es un espacio privilegiado la Plaza de la Fragata, justo delante de la playa y el mar, y bajo las escalinatas de la Iglesia. Cuenta con un único escenario en el que van actuando los diferentes grupos.
La entrada es gratuita, ya que su función es promover que cultura y música lleguen a todo el mundo, con un estilo variado buscando diversidad de público, ofrece conciertos de flamenco, reggae, punk-rock, folk… este año con grupos como Buhos, Jazzwoman, Zebrass Marching Band, Akelarre…y hasta una propuesta familias, con Pessigolles grupo de música infantil.
Atrae más de 10.000 asistentes, que además de disfrutar de la música y entorno de la plaza junto al paseo marítimo, pueden darse un baño en la playa.
Además, Sitges forma parte del conjunto de localidades que cada verano ofrecen los conciertos de MEDITERRANEAN GUITAR FESTIVAL
Cubelles
Festival Super Mati Custom
Celebrado del 11 al 14 de julio
Género: Rock&roll, rockabilly.
Cubelles es mucho más que una población turística, con extensas playas junto al Masís del Garraf y un núcleo histórico medieval.
Rock, moteros y automóviles clásicos en estado puro, uniendo la música y la pasión por las motos. Rock&Roll en Estado Puro. Inicialmente se llamaba Superbikecustom, pero en homenaje a una de sus fundadoras, Mati Sánchez, se modificó el nombre que actualmente mantiene.
Lo que surgió en 2017 como una concentración motera, ha evolucionado con su público siempre fiel a las motos, pero también en un ambiente festivo y familiar que ama el rock. Dando origen a la creación de la “Asociación Cultural Movimiento Rocker”, que transforma la población costera de Cubelles en un espacio que nos lleva a la época dorada del rock y rebeldía americana.
La esencia del Festival se inspira en las Legendarias concentraciones de los años 80 y 90 en EE. UU., priorizando la convivencia, alma motera, ambiente rockabilly, pero sin dejar el sabor mediterráneo. Además, cada año se sortea un impresionante viaje para dos personas para realizar la famosa ruta 66, visitar Las Vegas…
Alrededor del buen ambiente y los conciertos, cuenta con actuaciones de burlesque, actividades y exhibiciones de impresionantes coches y motos, Siendo un evento imprescindible para los fans del género musical rockabilly (Originario en Memphis y nacido como una combinación del rock and roll, música country y blues en la década de los 50, y resurgiendo como subcultura en los 70-80).
Un festival que muestra la esencia más pura del rock’n’ roll y el rockabilly de los años 50, también muestra los looks, tatoos y actitud, invadiendo las calles junto al rugido de los motores, pero siempre en el ambiente de una pequeña ciudad costera y buscando la cercanía del público.
Además, Cubelles del 20 hasta el 22 de junio, también forma parte del RUMBA TOUR FESTIVAL, el cual se celebra durante el verano en diferentes ciudades, como propuesta de autores y creadores de rumba catalana.
Y a finales de julio, participa en la ruta de una veintena de ciudades que acogen los conciertos, organizados por la cadena Los 40 Principales. Los 40 SUMMER LIFE donde los asistentes pueden bailar al ritmo de artistas del momento en los Jardines Las Salinas. Este año han actuado grupos como Walls, Bombai, DePol, Adexe…junto al broche final con los DJS sets a cargo de David Álvarez y Sergi Sánchez.
Sant Pere de Ribes
En la población interior de Sant Pere de Ribes florecen propuestas más locales, donde la música en directo se integra en fiestas populares, mercados artesanos o eventos gastronómicos. Pero sin duda nos ofrece uno de los festivales más originales, y además con una entrada muy económica, ya que el abono de 4 días no llega a los 30 euros, hablamos de:

Monocicle. Apoyo a la música de autor y a sus nuevos talentos
Fechas: 5,6,7 y 8 junio 2025
Estilo: música de autor.
Se trata de un Festival de Música de Autor, donde se promueven nuevos talentos y se celebra un concurso de cantautores y un concurso de videoclips. Se creó en 2010, como un ciclo de música de autor en el patio de la entidad cultural “Els Xulius”.
Con los años ha crecido y ampliado su oferta, pero siempre manteniendo la idea de ofrecer conciertos en un formato íntimo y cercano, y con ese espíritu colectivo, donde la pasión y la organización es horizontal, cuentan con el apoyo de muchos voluntarios. En 2015 evolucionó incorporando el Concurso de canción de autor, una plataforma para descubrir nuevos talentos y hacer que el propio público votara, en 2019 se añadió la idea de “monoclip” donde los autores presentaban videoclips de bajo presupuesto, para dar visibilidad también al aspecto audiovisual. Todo ello culminó en 2021 y finalmente se consolidó como Festival de Música de Autor/a Monocicle.
En estos años han actuado artistas y grupos de música catalanes reconocidos, pero también de Valencia, Mallorca… priorizando la oportunidad de descubrir nuevos talentos y celebrando este concurso para dar a conocer estas voces.
De nuevo, encontramos la importancia del entorno, ya que desde 2023 se celebra en un espacio histórico donde destaca el Castillo de Ribes, documentado en 990 como “Castillo de Bell-lloc o de Ribes”, y que fue tanto hogar del Príncipe de Olèrdola, y más adelante se convirtió en una cárcel. El recinto histórico actualmente está gestionado por el ayuntamiento, este un conjunto está formado por este Castillo del siglo X, la vieja Iglesia del siglo XVII y la Casa del Terme de 1502, y están situados justo al lado de la población.
El emplazamiento y características medievales lo convierten en un evento vertical y a dos niveles, accediendo a través de la calle Major, justo a los pies del castillo, donde encontramos un pequeño escenario, y también el espacio Monoxics, con ambiente familiar y zona de juegos para niños. Las tardes de viernes y sábado esta zona, sota-ribes, ofrece espectáculos y variada gastronomía con acceso gratuito y abierto a todo el mundo.
La parte más potente del Festival se sitúa en el conjunto histórico situado arriba, el castillo medieval, con los patios y espacios que lo conforman, zona a la que si se debe acceder con entrada. Subiendo por el camino (abstenerse de llevar zapatos de tacón), allí se encuentran los tres escenarios: Patio del castillo, interior de la antigua iglesia y con una sonoridad muy especial y la plaza del castillo.
Al anochecer se transforma todo el ambiente, los antiguos muros y paredes de piedra, los árboles, junto a los juegos de luces y unas impresionantes vistas a los campos que lo rodean y a la población, crean un espacio atemporal y relajante. Este ambiente y la cercanía con los artistas convierten este festival en algo único.
Además, Monocicle colabora con el Festival Tingladu (Vilanova), donde actúan algunos de los cantautores que han ganado en ediciones anteriores, y también con la mítica sala Heliogàbal de Barcelona, dónde se realizan las presentaciones del cartel del Festival. Se promueven los productos de KM0, con empresas locales de comida, vino y cerveza artesana del Garraf.
Han participado artistas como Quimi Portet, Adrià Puntí, Miqui Puig o El pony Pisador.
Y como el gran punto que lo diferencia de otros festivales, la organización del festival una vez ha recibido centenares de propuestas de nuevos cantautores, eligen a 3 finalistas y se integran en la programación, a cada participante se le facilita 30 minutos de tiempo para su presentación y actuación, con propuestas muy variadas y estilos que pueden pasar por el jazz, bossa nova, propuestas más urbanas…
En esta edición, de todas las propuestas recibidas, las ganadoras fueron:
Permio del Jurado y Premio Cúpula Música: Claró, Premio Tinglado: Marina Freixas, Premio del Público: Laura Escobedo.
Olivella, sensibilización con el territorio y slow live.
Feel Chill Experience
Fechas: 17 y 18 junio 2025.
Estilo: Chill out, ambient, lounge, chillwave, chillout fusion, chill house…
Este año se ha celebrado la 8ª edición del FEEL CHILL EXPERIENCIE, durante el sábado 17 y domingo 18 de junio, de ambiente familiar y con acceso gratuito.
Aunque este festival no es únicamente de música esta si tiene un papel destacado. El evento vincula la proximidad a la naturaleza, el bienestar y la música, donde bailar es tan importante como otras actividades paralelas para cuerpo y mente (como meditación y yoga), promoviendo un ambiente de bienestar y que invita a las familias a participar.
Durante los dos días cuenta con actuaciones y los djs en sesiones chillout como: Cotton Tree, Bbrothers, Matiquechua, Ensy Non, Dj Uniun, Manu Romero… El casco antiguo de la población se convierte en el escenario perfecto.
Canyelles:
Canyelles con solo 5.360 habitantes, es una población rural que actualmente no cuenta con ningún festival de música, pero si promueve ferias, mercados y eventos de artesanía, destacando la Feria de Navidad.
Entrevistamos a Toni Jordán, músico y director del Festival Monocicle:
Barcelona junto a Madrid son los principales referentes de Macro festivales de música en ciudades. ¿La proximidad del Garraf con Barcelona ofrece alguna forma alternativa a la centralización de la mayoría de los festivales?
Toni | ¡Totalmente! Ofrecemos entornos más locales y nos alejamos de estos macro eventos. El valor añadido de nuestro festival es la capacidad para crear espacios íntimos, con identidad propia y vinculados a las dinámicas de cada población. Trabajamos con artistas emergentes y propuestas que no suelen estar en los circuitos habituales, y aprovechamos también los recursos locales para difusión, estos para el público ya no son anónimos y se parte de una red conocido y próxima.
Nuestra finalidad no es reproducir el modelo de las grandes ciudades, sino explorar la como la cultura es un reflejo de identidad. Además, hay que destacar la labor de los voluntarios/as, ellos son una parte muy importante para el éxito y sostenibilidad de este tipo de festivales, ya que permite que se pueda destinar más recursos para grupos y cantantes e infraestructuras, al final el evento se convierte en orgullo colectivo. Es una fórmula que funciona, y se puede compartir recursos y voluntariado creando alianzas con otros festivales.
Garraf es Tierra de Festivales ¿En qué se diferencia Monocicle del resto de festivales de la zona?
Toni | La comarca acoge una escena muy diversa, donde cada propuesta tiene un finalidad y carácter propio, Si agrupamos en bloques: hay festivales autogestionados y comunitarios como es el nuestro, con un presupuesto ajustado y apoyo asociativo y del ayuntamiento. Luego están los temáticos y especializados como el Nowa Reggae o FIMPT…, otros con fines comerciales como Vida, Terramar, Be Live (se celebra antes del verano), que cuentan con grandes patrocinadores y equipos profesionales y sin menos función de voluntarios en la organización, pero que a la vez generan un gran impacto económico en las ciudades donde se celebra.
Monocicle nació como un proyecto cultural y es un festival para” el pueblo” , este se organiza como un colectivo, aunque hay un pequeño equipo de 5 personas que asumimos la tarea durante todo el año (contrataciones artistas, programación, infraestructuras, logística, comunicación, diseño, aspectos legales, permisos, tesorería…), también contamos con colaboradores habituales que cada año nos apoyan en algunas tareas, además del uso de espacios municipales, y apoyo de empresas locales y cercanas, sin grandes patrocinadores. Pero el voluntariado es el pilar imprescindible para que funcione, ellos cubren todas las necesidades (entradas, venta de consumiciones, montaje, control de acceso, apoyo técnico, gestión de horarios, cocina…).
¿Un festival con apoyo local y voluntariado en que se diferencia a uno más comercial con grandes espónsores (además de la entrada de capital)?
Toni | Primero, y muy importante, hemos conseguido mantener el equilibrio entre la “profesionalidad” y el voluntariado cuando este festival ha ido creciendo, y ha dejado de ser un evento o fiesta sólo local. Esto nos ha permitido ofrecer una programación más ecléctica, no condicionada por géneros o tendencias. En nuestro caso es clave el concurso de canción de autoría y el Monoclip (videoclips lowcost), siendo la esencia del festival y diferenciándose del resto del Garraf. No nos limitamos a artistas ya consolidados, sino que invertimos para un Monocicle del futuro.
¿Qué hemos visto este año en Monocicle?
(Toni) El festival que abrió el jueves 15 de agosto empezó con un concierto íntimo de Ölivias en el interior de la iglesia del Castillo, una voz delicada que emociona. Y todos los asistentes además pudieron disfrutar de un piscolabis para celebrar los 15 años del Festival. El viernes 16 fue una noche de Leyenda, con artistas como Adrià Puntí, Quimi Portety Miqui Puig. Además, se pudo disfrutar de los conciertos de artistas emergentes como es Jara Mago, con una propuesta fresca y muy personal, y el dúo de Mallorca Thelee, con música electrónica mediterránea.
El sábado 17 asistimos a una explosión de energía con Roger Canals y su espectáculo familiar “Reboobon”, seguido de sonidos rebeldes de Al:lèrgiques al pol·len, Dan Peralbo i el comboi, Les Testarudes y la música experimental de OKDW. La final del Concurso de Autor/a, descubriendo nuevas voces y terminando la noche bailando con el ritmo de Balma. El domingo 18 se cerró la edición con un acto especial, con Olga Zoet pudiendo disfrutar de nuevo con la voz de la ganadora del concurso del año pasado, además de una entrevista y concierto único entre la periodista María Junyent y el cantante mallorquín Cris Juanico, de nuevo resaltando los encuentros íntimos y musicales.
Los festivales del Garraf no pretenden competir con los grandes colosos musicales. Al contrario, se posicionan como alternativas conscientes, donde su entorno natural y arquitectura histórica tiene tanto protagonismo como los artistas. Además, cuentan con el apoyo de los propios ayuntamientos, y la mayoría son gestionados por entidades sin ánimo de lucro, o bien con sellos locales ya profesionalizado. Muchos de ellos cuidan el aspecto diferencial, mientras apuestan por la gastronomía local, apoyan medidas de sostenibilidad del medio ambiente y la implicación del tejido social, ya que muchos de estos festivales están autogestionades por entidades locales, sin ánimo de lucro. Es música, pero también es comunidad, paisaje mediterráneo y estilo de vida.
Los puntos más fuertes son el pequeño formato que huye de la masificación permitiendo disfrutar de la música a sus asistentes, evitando grandes colas y masificación. Y aunque no cuenten con elevados presupuestos, también aportan grandes cabezas de cartel, pero sobre todo apuestan por los nuevos talentos y artistas locales. Unas propuestas a tener en cuenta el próximo verano y aprovechar para hacer turismo en ciudades y localidades no tan masificadas, mientras se disfruta de festivales en formato más reducido.
Fuente: Mónica Grau Seto | @monmislilith en nuevatribuna.es