La pareja de Ayuso pagó 77.000 euros a directivos de la empresa que su jefe de Quirón creó en Panamá [conexión: Quirón-pareja Ayuso-ático]

Además de los pagos a Fernando Camino, ejecutivo del gigante sanitario, también hay 30.000 euros por “asesoramiento” de un empresario condenado por estafa o 25.000 euros a un contratista del PP

Alberto González Amador pagó 77.665 euros a tres directores de Insumos Médicos del Pacífico, empresa en el paraíso fiscal de Panamá que Fernando Camino, el presidente de Quirón Prevención, creó en 2013, y que la pareja de Isabel Díaz Ayuso administró mientras defraudaba a Hacienda.

Las transferencias constan en la documentación remitida al juzgado que investiga a la pareja de la presidenta de la Comunidad de Madrid por sus delitos fiscales de los ejercicios 2020 y 2021, por los que ha sido citado a declarar el próximo 7 de febrero. En total los pagos de González Amador a esos cuatro ex miembros (todos españoles) del directorio de esa empresa panameña, disuelta en 2022, ascendieron a 603.501,92 euros.

El 87% de esa cifra, 525.836,92 euros, fue para el primer ejecutivo de Quirón Prevención, su principal y casi único cliente, y se realizaron en 2019 y 2020. En las facturas aportadas también figuran otros 30.000 euros en pagos por “asesoramiento” de un empresario condenado por estafa en 2018. Y 25.000 euros a un contratista habitual del PP de Mariano Rajoy.

La parte mollar es el medio millón (499.836,92 euros) que González Amador desembolsó en diciembre de 2020 por Círculo Belleza SL. Esta micropyme sin activos, dedicada a tratamientos de estética , estaba a nombre de la esposa de Fernando Camino. González Amador la compró tras el pelotazo de dos millones que dio por intermediar en la compra de mascarillas para una empresa gallega, Mape, que entonces ya administraba su jefe en Quirón

Ante el desproporcionado importe que pagó por Círculo Belleza SL, la jueza ya investiga esa operación con el apoyo de la Fiscalía, que aprecia una presunta “corrupción en los negocios” y apunta a posibles sobornos con esa posible “comisión encubierta”. La corrupción en los negocios, delito adicional a los ya confesados por González Amador, está penada con hasta cuatro años de prisión.

Tras iniciar su relación con Ayuso, la pareja de la presidenta madrileña multiplicó por cuatro los ingresos que recibía de Quirón, líder de la sanidad privada en España y gran beneficiaria del modelo sanitario de “colaboración público-privada” en Madrid. El empresario utilizó Círculo Belleza SL para seguir defraudando a Hacienda en 2021, según determinó la Agencia Tributaria. Y antes de adquirirla por esa elevada cifra, le pagó 20.000 euros por recibir “asesoramiento” mientras realizaba auditorías de calidad para Quirón Prevención.

González Amador también abonó al menos 6.000 euros a otra firma de Fernando Camino, Inversiones Random SL, por poner propaganda a un yate de su propiedad. Los primeros pagos los pactaron tras echar a andar en 2017 la consultora de la pareja de Ayuso, Maxwell Cremona, por lo que la cifra final que entregó a Camino podría superar esos 525.836,92 euros.

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Esta suma no incluye los 6.500 euros que la pareja de Ayuso abonó por el renting de un BMW a nombre de la esposa del ejecutivo de Quirón, la farmacéutica de León Gloria Carrasco, durante todo el ejercicio 2021, último investigado por Hacienda.

Las transacciones a exdirectores de esa empresa en Panamá, que González Amador ha asegurado que “jamás” utilizó, no acaban en Camino. También pagó otros 30.000 euros en marzo de 2020 por “asesoramiento en la comercialización de servicios de consultoría estratégica” a Curramba SL, aparentemente inactiva desde hace años.

El administrador único de esta empresa es José Antonio De la Cerda Rosillo, uno de los primeros directores de Insumos Médicos del Pacífico. De la Cerda fue tesorero de esa firma panameña, junto a Fernando Camino, que figuraba como secretario. En 2014 cedió los amplios poderes que tenía en ella a González Amador. 

Curramba se dedica (o dedicaba) al ámbito inmobiliario o “importación y exportación de todo tipo de productos alimenticios, y objetos de regalo y hogar”, según sus últimas cuentas, de hace ya siete años. Esa factura de 30.000 euros (más IVA) por “consultoría estratégica” de Curramba a González Amador está fechada el 25 de marzo de 2020: en lo peor de la pandemia de coronavirus que convirtió en millonario al empresario gracias a ese pelotazo con las mascarillas propiciado por su jefe en Quirón.

Para entonces, Curramba SL llevaba ya años sin presentar cuentas. En las últimas disponibles en el Registro Mercantil, de 2017, declaró una facturación de poco más de 35.000 euros.

Su administrador único, José Antonio de la Cerda, fue condenado en 2017 por el Juzgado de la Penal 2 de Terrassa por un delito de estafa continuada mediante la entrega de pagarés sin fondos a tres empresas. La Audiencia Provincial de Barcelona ratificó en 2018 la estafa de mayor importe, 14.145,49 euros. 

Fue un caso de poca monta: “Con la intención de enriquecerse ilícitamente”, De la Cerda compró a través de Curramba SL a una empresa de Lleida “50 jamones por valor de 14.145,490 euros por los cuales entregó pagaré con fecha de vencimiento 20/8/2005 que fue devuelto por la entidad Deutsche Bank por falta de fondos”, dice la sentencia.

Vinculación con Vox

El nombre de José Antonio de la Cerda remite a un candidato de Vox en las últimas elecciones municipales en Sepúlveda (Segovia). De esta formación de ultraderecha es Vicente Brisa, concejal en Boadilla del Monte (Madrid) y directivo de la empresa de aeronáutica Aciturri. En la contabilidad remitida al juzgado no figuran pagos de González Amador a Brisa o sus empresas.

Sí constan a la mercantil Aerofalcon, también vinculada al sector aeronáutico y propiedad de Juan Carlos González Pérez, otro ex director de Insumos Médicos del Pacífico. En mayo de 2021 Aerofalcon emitió una factura de 17.500 euros a la consultora de González Amador, Maxwell Cremona, por el alquiler de una oficina entre el 1 de abril de ese año y el 31 de diciembre de 2022. 

Y del último día de 2019 consta otra factura de 7.500 euros de Aerofalcon en concepto de “asesoramiento técnico en sector Aeronáutico ISO 9100”, una norma de sistemas de gestión de la Calidad en la industria aeronáutica. En mayo pasado, elDiario.es publicó, basándose en el informe de la Agencia Tributaria, que correspondía a servicios prestados a González Amador.

Pero en realidad el pagador fue la pareja de Ayuso, como muestra esa factura remitida al juzgado. Aerofalcon se declaró en concurso de acreedores el pasado 6 de febrero, cuatro días después de que el abogado de González reconociera por escrito que cometió dos delitos fiscales para evitar el juicio.

Esas facturas de Aerofalcon y de Curramba no figuran entre las que Hacienda tachó de “falsas o falseadas” en la trama de empresas pantalla que usó González Amador para defraudar 350.951 euros a Hacienda y que adelantó elDiario.es en marzo.

El dueño de Aerofalcon, González Pérez, recibió decenas de pequeños contratos de la empresa pública Renfe en la etapa de Rajoy. Fue nombrado presidente de la panameña Insumos Médicos del Pacífico poco después crearla Fernando Camino. Y figuró en su directorio hasta 2022 junto a González Amador.

Ambos fueron también directores de la sucursal panameña de Aerofalcon, vetada en noviembre de 2023 por el Gobierno estadounidense por participar “en actividades contrarias a los intereses de seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos” al “eludir supuestamente las sanciones estadounidenses y suministrar a los representantes de [Nicolás] Maduro piezas de aviones de origen estadounidense”. 

Ayuso ha acusado a la Fiscalía de actuar “a la venezolana” en el caso de fraude fiscal confesado por González Amador. Asegura que España va camino de ser una “dictadura” y ha hablado de conspiración de todos los poderes del Estado por ser su pareja “alguien relacionado con un adversario político”. 

Panamá, Usera y Florida

El cuarto director de Insumos Médicos del Pacífico que recibió fondos de González Amador es César Nieto, uno de sus colaboradores en sus auditorías de calidad para Quirón. Constan facturas por “asesoramiento” de Nieto de 11.956 euros en 2019 y 7.000 euros en 2020 (como “experto técnico en el sector salud”), y otras por asistencia a cursos o billetes de avión. En total, los pagos alcanzan 22.665 euros.

La relación entre González Amador y César Nieto abarca varios continentes y está muy vinculada a inversiones inmobiliarias. En marzo de 2022, dos días después de iniciarse los trámites para liquidar Insumos Médicos del Pacífico, ambos montaron una empresa de alquiler de alojamientos turísticos en Madrid, October Twelve Accomodation SL. 

Con ella compraron en abril de 2022 sin hipoteca dos locales comerciales en el barrio de Usera, muy cerca del Hospital 12 de Octubre, que reformaron para alquileres de corta estancia. En el portal de reservas Booking, el alojamiento para el primer viernes de febrero se ofrecía el pasado jueves a 86 euros la noche.

González Amador y César Nieto también montaron una empresa en Florida (Estados Unidos), Burnet & Brown, que administra un agente inmobiliario allí. La crearon a finales de 2022, en plena investigación fiscal y la misma semana en que Hacienda notificó que ampliaba su inspección a la pareja de Ayuso.

Las inversiones en ladrillo del empresario tras su fraude fiscal comprenden el piso de lujo que adquirió en julio de 2022 en Chamberí. Allí vive junto a Ayuso y ambos disfrutan de una segunda vivienda en la planta superior a nombre de una empresa que administra un abogado de León muy cercano a Fernando Camino, representante de González Amador durante la inspección de Hacienda. La dueña de ese ático, Babia Capital, lo compró al contado tras recibir 955.000 euros de un tercero cuya identidad es por ahora la gran incógnita de esta trama.

Ni Isabel Díaz Ayuso ni nadie de la Comunidad de Madrid han respondido nunca a la pregunta sobre quién paga y por qué ese ático ubicado encima de la vivienda que compró González Amador, en uno de los barrios más caros de la capital.

La panameña Insumos Médicos del Pacífico, de actividad desconocida y ajena al grupo Quirón, según el gigante sanitario, estuvo años inactiva por no pagar las tasas que cobra la administración panameña. Esto implica la suspensión de esas sociedades, que no pueden inscribir ningún acto corporativo. Al estar en situación de “morosidad” tres años consecutivos, llegó a estar inhabilitada por el Gobierno panameño, que en 2021 también vetó a una filial de Quirón allí durante diez años por prácticas corruptas

La sociedad panameña que administraron González Amador y Fernando Camino, César Nieto o José Antonio de la Cerda se reactivó el 5 de mayo de 2022, un día después de protocolizarse el acta de disolución de la sociedad. “Pagó todas las tasas únicas pendientes y se requiere reactivar”, indica un documento depositado en el registro mercantil de Panamá por esas fechas.

Justo después de esa “reactivación”, Insumos Médicos del Pacífico se disolvió, en paralelo a la apertura de la inspección de Hacienda a Maxwell Cremona, notificada a González Amador el 12 de mayo de 2022.

Fuente: Antonio M. Vélez en eldiario.es

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Fuente: Pedro Águeda / Antonio M. Vélez en eldiario.es

El grupo de León: la conexión entre Quirón, la pareja de Ayuso y el ático de Chamberí

Una investigación ampliada a Alberto González Amador tiene que mirar a la capital leonesa; allí residen el directivo de Quirón de la presunta “comisión” de las mascarillas o los dueños del ático de lujo del que disfrutan el empresario y la presidenta

Los secretos de Alberto González Amador descansan en el norte. Es en la ciudad de León donde residen, o de donde proceden, los empresarios y el fiscalista que conocen los negocios de quien comparte su vida con Isabel Díaz Ayuso. Los mismos que saben quién paga el ático de lujo que se sitúa justo encima del piso que compró González Amador tras cometer el fraude fiscal que ha reconocido y que utiliza la pareja. De momento solo han emergido cuatro nombres: el director de Quirón Prevención, Fernando Camino; su mujer, la farmacéutica Gloria Carrasco; el abogado fiscalista Javier Gómez Fidalgo; y el empresario hostelero Jorge Pablos. Por el momento, los cuatro callan. 

El futuro de esta línea de investigación está en manos de la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Madrid, encargada de resolver los recursos a las decisiones de la jueza del caso de Alberto González Amador. La magistrada, el fiscal y la acusación popular creen que hay indicios para investigar más allá del fraude fiscal que ha reconocido el empresario para evitar la cárcel, pero serán los jueces quienes tengan la última palabra ante el recurso presentado por la defensa de González Amador solicitando el archivo de la pieza separada. 

El último en pronunciarse ha sido el fiscal, quien en un escrito entregado el pasado día 10 advertía de que la pareja de Ayuso podría haber cometido “corrupción en los negocios”. Se refería a la compra por medio millón de euros de una empresa que solo contaba con tres instrumentos de depilación ya amortizados, un portátil y ningún trabajador. La identidad de la dueña de la empresa y el negocio redondo que hizo con la venta a González Amador nos permite dibujar la primera flecha que apunta a León. 

Primera flecha: prodigioso ‘Círculo de Belleza’

El 4 de diciembre de 2020, Maxwell Cremona, principal sociedad de Alberto González Amador, adquiere Círculo de Belleza S.L por 499.836 euros. Su propietaria tiene una farmacia en Pola de Gordón, localidad a media hora en coche de León capital y fue presidenta del Colegio de Farmacéuticos de la región. Su nombre, Gloria Carrasco.

La Agencia Tributaria investigó durante dos años a Alberto González Amador después de detectar que sus ingresos habían crecido en 2020 exponencialmente sin que eso tuviera reflejo en el pago de sus impuestos. Resultó que el empresario había tejido una trama de empresas pantalla y facturas ficticias para dejar de pagar a Hacienda 350.951 euros al fisco

En el informe que motivó la querella de la Fiscalía, los técnicos de la Agencia Tributaria advierten que el medio millón que pagó González Amador por Círculo de Belleza es “un importe elevado si atendemos a lo declarado en el Impuesto sobre Sociedades del ejercicio 2020” por la propia empresa, que ese año declaró un beneficio de apenas 24.000 euros. 

La pareja de Ayuso alegó que la adquisición de Círculo de Belleza era “una apuesta de Maxwell Cremona [la sociedad de González Amador] por esta empresa”. “Es quien nos hacía de enlace con las farmacias para implantar el Covid Seguro. Además, esta empresa tiene un contrato con Mape”, dijo a los inspectores Alberto González Amador. 

¿Mape? ¿Puede ser eso cierto? ¿Qué importancia tiene esta empresa? Es el momento de lanzar una segunda flecha también en dirección a León. 

Segunda flecha: el negocio que cambió la vida de Alberto 

Los últimos años de Alberto González Amador como empresario residente en el distrito de Barajas cambiaron en 2020 cuando pasó a facturar seis veces más que en los ejercicios anteriores. El año de la pandemia supuso un enorme crecimiento empresarial para él: 2,3 millones de euros de facturación (y solo 8.425 de beneficio, según declaró a Hacienda).

La culpa de ese salto fue de un “trabajo de intermediación”, según lo llama él, en una compraventa de mascarillas. Por poner en contacto a la empresa catalana FCS Select Product, que le había contratado para encontrar clientes, y la pontevedresa MAPE, González Amador se embolsó 2 millones de euros. La cantidad es el 4,5% de una operación por valor de 42 millones, repartidos en dos pedidos en mayo y agosto de 2020.

¿Y qué relación tiene MAPE con Círculo de Belleza? La primera tiene entre sus administradores a Fernando Camino Maculet. El empresario es esposo de Gloria Carrasco, la dueña de la segunda compañía, la que contaba con los tres aparatos de depilación y un viejo ordenador y por la que Alberto González Amador pagó medio millón de euros. 

La compra de Círculo de Belleza SL se produjo apenas tres meses después de que completarse la operación más exitosa de González Amador, 2 millones de euros. Todo gracias a que la empresa que administra el jefe de González Amador en Quirón y esposo de Gloria decidiera comprar 42 millones en mascarillas a la firma que había prometido un porcentaje por ventas a Alberto. González Amador no encontró ningún cliente más para el material de FCS y, ante la Agencia Tributaria, alegó que para lograr que la empresa gallega comprara las mascarillas a la catalana tuvo que recurrir a una sociedad radicada en Florida, Inteconn, y que tuvo que viajar incluso a Nueva York.

Inciso: la firma catalana fue la misma que vendió durante la pandemia más de 200 millones de euros en material traído de China al Ministerio de Sanidad del Gobierno de España sin precisar de ningún intermediario. 

El delito de corrupción en los negocios que piden investigar Fiscalía y acusación popular alude a la posibilidad de que el medio millón de euros que la pareja de Ayuso pagó por Círculo de Belleza no fuera más que una manera encubierta de entregar a su amigo Fernando Camino su parte del negocio de las mascarillas, una comisión o “soborno”, dentro de un pacto entre ambos que hizo posible la venta del material sanitario. 

Tercera flecha: un amigo en Quirón

Alberto González y Fernando Camino se conocieron hace una década trabajando ambos en el mundo de las mutuas. Camino abrió a González las puertas de la consultoría sanitaria en el Grupo Quirón, el gigante de la sanidad que factura cientos de millones de euros a la Comunidad de Madrid. La implicación con Quirón de González Amador es tal que tiene una cuenta de correo electrónico corporativa del grupo y el jefe de gabinete de la presidenta madrileña, Miguel Ángel Rodríguez, guarda su contacto en el móvil como “Alberto Quirón”.

González Amador firmó su primer contrato con Quirón Prevención en 2017, cuatro años antes de la fecha en la que una revista del corazón publicó que había comenzado a salir con Isabel Díaz Ayuso. Desde que son pareja, la facturación de González Amador al grupo sanitario se ha multiplicado por cuatro

De los 275.273,83 euros que facturó Maxwell Cremona, la firma de González Amador, a Quirón Prevención en 2020 pasó a 722.180 el año que empezó la relación con la presidenta, en 2021, cuando se le presentó en sociedad como un “técnico sanitario”. Y eso hay que añadirle otros 327.000 euros que le facturó en ese ejercicio con otra firma, Masterman & Whitaker Medical Supplies and Health Process Engineering SL (a partir de ahora Masterman & Whitaker). ¿Y esta segunda sociedad? ¿De dónde sale? Es el nombre con que González Amador rebautizó a la empresa comprada en 2020 y que hasta ese momento se llamó Círculo de Belleza SL. 

Efectivamente, Master & Whitaker es la reconversión de aquella poco ilusionante sociedad de los tres instrumentos de depilación y el ordenador portátil. González Amador supo darle uso. Según la Agencia Tributaria y la Fiscalía, un uso legal. Porque después de dejar de ser Círculo de Belleza, la sociedad siguió sin empleados.

Los inspectores de la Agencia Tributaria creen que González Amador utilizó Masterman & Whitaker como “mera sociedad interpuesta”, a la que le cargaba trabajos que en realidad realizaba su otra firma, Maxwell Cremona. Un beneficio de créditos a futuro le permitía ahorrarse impuestos de forma ilegal. Los técnicos de Hacienda han repetido a lo largo de su informe que sin personal ni tecnología la nueva firma no tenía capacidad de afrontar esos trabajos ni presentó durante los dos años de inspección ninguna prueba de haberlos realizado.

Camino y González Amador exportaron su amistad fuera de España. La pareja de la presidenta madrileña administró hasta 2022 una empresa en el paraíso fiscal de Panamá que el directivo de Quirón había creado en 2012. Por algún motivo, tras los dos ejercicios fiscales del fraude reconocido por González Amador, el empresario disolvió la sociedad. 

La operación de la que salió la comisión de la pareja de Díaz Ayuso

Cuarta flecha: el fiscalista que pone su nombre 

Durante los dos años que duró la inspección de la Agencia Tributaria, Alberto González Amador estuvo representado por un fiscalista de León llamado Javier Gómez Fidalgo. Muy conocido en la capital leonesa, Gómez Fidalgo tiene una relación personal y ha trabajado igualmente para Fernando Camino. 

Pero la conexión de González Amador y Fidalgo no acaba en la representación ante Hacienda del segundo. La investigación de elDiario.es desveló que el piso que compró González Amador después del fraude fiscal, y que comparte con Isabel Díaz Ayuso en una acomodada zona de Madrid, es solo una de las dos viviendas de las que la pareja disfruta en el mismo inmueble. 

Encima del piso adquirido a nombre de González Amador se sitúa un ático de 176 metros cuadrados que la pareja reserva como gimnasio y para celebrar cenas y fiestas. Esa vivienda está a nombre de una sociedad, Babia Capital SL, cuyo administrador es Javier Luis Gómez Fidalgo, el fiscalista de León que también ha trabajado para Camino. 

La inmobiliaria Babia Capital compró el ático del que disfruta Ayuso el 21 de julio de 2023, dos días después de que González Amador registrara la compra del piso de abajo. Hace diez meses que elDiario.es reveló que la presidenta madrileña hace uso de un piso de lujo cuyo propietario es una sociedad administrada por un fiscalista de León que a su vez está relacionado con un directivo de Quirón, la empresa que recibe contratos millonarios de la Comunidad de Madrid. Ni Ayuso ni su equipo han dado una sola explicación. Los medios de comunicación a los que Ayuso sí concede entrevistas evitan preguntarle por el asunto. 

Pero que Gómez Fidalgo sea el administrador único de Babia Capital no quiere decir que sea necesariamente dueño del ático. Con esta pregunta nace la quinta flecha del caso González Amador en dirección a León. 

Quinta flecha: el hostelero de León dueño del ático

Cuando la sociedad Babia Capital compró el ático situado en la séptima planta del edificio, sus dueños sabían hace meses que la presidenta madrileña y su pareja iban a vivir justo debajo. Alberto González Amador escrituró la compra de la vivienda en la sexta planta en julio de 2022, pero no acudió al Registro de la Propiedad hasta mayo de 2023, una vez celebradas las últimas elecciones autonómicas. Cuarenta y ocho horas después de registrar la compra de la vivienda, Babia Capital SL compró el ático de la séptima planta.

Eran aquellos días en que Ayuso confesaba en sus entrevistas más desenfadadas estar pensando en comprar un piso en el distrito de Chamberí por los altos precios que estaba alcanzando el alquiler en la capital. elDiario.es preguntó a su jefe de gabinete la víspera de publicar la primera información si, tal y como había publicado sin que nadie de la Comunidad de Madrid, lo hubiese desmentido, Ayuso se había comprado una vivienda en Madrid. No hubo respuesta.

En abril de 2024, este periódico desveló que el principal dueño de Babia Capital SL es un hostelero de León, Jorge Carlos Pablos Alonso, o Jorge Pablos, como le llaman en la ciudad. El precio de mercado del ático ronda los 1,6 millones de euros. Si se suma al valor del piso que compró González Amador, alrededor de 1,2 millones, las dos viviendas de las que disfrutan la pareja suman casi 3 millones de euros. 

Sobre el piso del sexto pesa una hipoteca de González Amador por valor de 500.000 euros, pero en el ático de Babia Capital no hay deuda. El pasado agosto, elDiario.es desveló que la sociedad compró el ático al contado después de recibir un préstamo de 955.000 euros por un tercero, sin que las cuentas anuales de Babia permitan aclarar si fue otra empresa o una persona física. 

La inmobiliaria, sin ningún empleado y con una actividad muy discreta (en 2023 declaró una facturación de algo más de 200.000 euros), compró ese ático sin vender patrimonio, ni recurrir a dinero de sus socios, ni de empresas vinculadas. Según las cuentas presentadas hace unos meses, tampoco recurrió a financiación bancaria, que habría sido lo normal tratándose de una empresa de una dimensión tan pequeña, incapaz de afrontar una operación de ese importe con sus propios recursos.

Por ahora no hay respuesta a la pregunta sobre quién prestó casi un millón de euros a la sociedad que compró el ático del que disfruta la presidenta madrileña en una de las mejores zonas del ya de por sí acomodado barrio de Chamberí. Todos los protagonistas de la conexión leonesa de este caso han declinado hacer ninguna declaración en las reiteradas ocasiones en las que elDiario.es se lo ha pedido. Solo el hostelero Jorge Pablos se limitó a decir que Babia Capital no era solo de él. Quiénes son sus socios continúa siendo un misterio.

Fuente: Pedro Águeda / Antonio M. Vélez en eldiario.es

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