Arrojar los restos de una obra, muebles viejos, electromésticos o neumáticos en descampados, solares abandonados o en los márgenes de cualquier carretera se ha convertido en una práctica creciente en los últimos años en la ciudad de Madrid. El Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Madrid ha denunciado este lunes la existencia de al menos una decena de zonas de la capital donde se arrojan residuos de forma incontrolada, la gran mayoría en los distritos del sur. Estas prácticas, además de ilegales, pueden generar incendios y tienen un impacto negativo en el Medio Ambiente.
“Son solo los que hemos detectado en base a las denuncias que nos llegan. Es muy complicado saber cuántos vertederos ilegales hay en total porque aparecen nuevos con mucha facilidad”, han explicado desde el PSOE. En concreto, los socialistas han detectado vertidos de escombros en solares próximos al polígono Marconi y en parcelas cercanas a la M-45 en Villaverde, así como en el Camino de Valdecarros, Las Barranquillas, el Ensanche de Vallecas y en la carretera de Villaverde a Vallecas. Estos vertederos ilegales se unen a otros existentes en Moratalaz, San Blas y Hortaleza. También continúa activa la mayor escombrera de la capital, de tres kilómetros, situada en el Camino de la Magdalena de Villa de Vallecas.
El partido denuncia que las escombreras han aumentado en los últimos años por la escasez de escombreras legales, ya que en la actualidad en Madrid solo hay una –La Salmedina– en Valdemingómez (Villa de Vallecas). Tampoco ayuda el hecho de que cinco distritos carezcan de puntos limpios fijos, donde los vecinos que hagan pequeñas reformas en casa pueden depositar hasta 120 kilos de escombros (cuatro sacos pequeños), una cantidad insuficiente.
A esto habría añadirle que la recuperación económica ha propiciado un repunte en la construcción y reforma de viviendas, lo que ha provocado un aumento de los restos de obra, muchos de los cuales acaban en improvisadas escombreras. Las estimaciones socialistas hablan de que en los vertederos ilegales de Madrid se acumulan al menos 10.000 toneladas de escombros y residuos.
“Ha habido una dejación de funciones clara del Ayuntamiento y de la Comunidad (con competencia en las vías pecuarias) para actuar sobre estos vertidos ilegales”, ha criticado el portavoz del PSOE en el Consistorio Pepu Hernández, que ha exigido al Gobierno municipal la identificación de todos los vertederos y la elaboración de un plan para erradicarlos.
El PSOE logró en los presupuestos de 2017 incluir una enmienda para realizar un inventario, pero no se elaboró un plan concreto. Solo se realizaron limpiezas puntuales. La Ordenanza de Limpieza de los Espacios Públicos y Gestión de Residuos del Ayuntamiento de Madrid considera una infracción grave “depositar directamente en los espacios públicos cualquier clase de escombros o residuos procedentes de obras de construcción, remodelación o demolición”. La multa oscila entre los 751 y los 1.500 euros.
Fuente: 20minutos.es
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